Estas son las tareas para la novena semana del camino del artista.
1. Relee tus páginas matutinas.
Recomiendo utilizar dos rotuladores de distinto color, uno para resaltar los descubrimientos y otro para las acciones que son necesarias. No juzgues las páginas y no te juzgues a ti mismo: esto es muy importante. Esta lectura puede ser aburrida o penosa; debes considerarla como un mapa, como una fuente de información, no como un veredicto.
Balance. ¿De quién te has estado quejando? ¿Qué has estado postergando? ¿Qué te has permitido cambiar o aceptar?
Emociones. Muchos de nosotros notamos una tendencia alarmante a pensar todo en términos de opuestos: "Eres terrible, eres maravilloso; lo odio, lo amo; es un magnífico empleo, es, un pésimo empleo".
Reconocimiento. Las páginas nos han permitido descargarnos sin ser autodestructivos, planear sin interferencias, quejarnos en secreto, soñar sin restricciones, conocer nuestra propia mente. Valórate por haberlas escrito. Valóralas por los cambios v el crecimiento que te han permitido alcanzar.
2. Visualización.
Ya has realizado el trabajo de identificar tu meta y tu verdadera dirección. El ejercicio siguiente consiste en imaginarte habiendo alcanzado tus objetivos. Tómate el tiempo necesario para describir los detalles que harán que la experiencia sea realmente valiosa para ti.
Describe tu meta: Yo soy...................................................
Descríbete a ti mismo en presente, llevando a cabo esta meta con todas tus posibilidades. Ésta es tu escena ideal. Léelo en voz alta.
Exhíbelo en tu lugar de trabajo.
Durante la próxima semana combina algunas fotografías tuyas recientes con recortes de revistas en un montaje que re presente la escena ideal que describiste antes. Recuerda que ver es creer y la inclusión de ti mismo en la escena ideal le dará más realidad.
3. Prioridades. Describe tus metas creativas para este año, para este mes, para esta semana.
4. Retroceso creativo. Todos nosotros hemos pasado por este proceso. Describe algunas de estas experiencias, especialmente la Perdónate todos tus defectos tu falta de energía, de iniciativa o de sentido de la oportunidad. Redacta una lista personalizada de afirmaciones que te ayude a mejorar en el futuro. Con mucho cuidado, con muchísimo cuidado, considera si es posible rescatar alguna idea abortada, abandonada o saboteada. Recuerda que no estás solo y que todos hemos pasado por estos retrocesos en nuestra creatividad.
Elige una de estas experiencias de retroceso, recupérala y enmiéndala.
Ahora, en vez de caer en un retroceso, date cuenta de tu resistencia. ¿Las páginas de la mañana te parecen difíciles, estúpidas, inútiles, demasiado obvias? Escríbelas, de todos modos. ¿Qué sueños creativos podrían hacerse realidad? Admite que esto te atemoriza.
Escoge un tótem artístico: puede ser un muñeco, un juguete de cuerda, un animal de peluche o una figura tallada. Lo importante es elegir algo hacia lo cual puedas tener inmediatamente un sentimiento de protección. Dale a tu tótem un sitio de honor y luego hónralo no maltratando a tu niño artista.
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