Las marcas quieren que los creativos que trabajan en su Comunicación entiendan su actividad y se impliquen con sus modelos de negocio.
Esta es la principal conclusión del estudio “Deconstrucción/reconstrucción del creativo: el creativo en el entorno actual” elaborado por el Club de Creativos (c de c) y la Universidad de Nebrija y presentado en rueda de prensa esta mañana. Para afrontar las nuevas exigencias de los clientes, el informe concluye que estos profesionales necesitan someterse a procesos constantes de formación, especialmente en cuestiones relacionadas con la digitalización, como el análisis de datos, o en áreas muy específicas como el Branded Content, entre otras.
“Las empresas nos han dicho que quieren trabajar con creativos comprometidos con sus modelos de negocio”, afirma Concha Wert, gerente de c de c. “El estudio muestra que el creativo actual, además de ideas, debe tener conocimientos y habilidades que le permitan conectar estas ideas con las tecnologías sobre las que se van a desarrollar, así como con las necesidades reales del usuario”.
“En un entorno de crisis económica y de explosión de la cultura digital, en el que el consumidor ocupa un papel cada vez más relevante, la formación de los creativos tiene que evolucionar de manera constante”, dice Marta Perlado, decana de la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la Universidad Nebrija. “En consecuencia, nosotros –como formadores– tenemos la obligación de actualizar continuamente nuestra oferta educativa para dar un mejor servicio a las empresas, a través de los profesionales que salen de nuestras aulas”.
Nuevas capacidades profesionales
El estudio “Deconstrucción/reconstrucción del creativo” apunta hacia un panorama de “superespecialización” con exigencias y capacidades profesionales nuevas para el creativo. Tiene que tener nociones de Empresa y Finanzas, así como mejores conocimientos de Marketing y de Planificación Estratégica. Además, necesita saber manejar técnicas, herramientas y datos. Es decir, necesitan conocer cómo funciona la conectividad en el mundo digital, cómo funcionan las métricas, modelos de análisis de la experiencia de usuario, y técnicas innovadoras como, por ejemplo, el Branded Content o la Gamificación. Por último, su actitud debe ser de vigilancia constante de la actualidad.
“El diálogo entre las marcas y la gente ahora es casi continúo y hay que saber qué es actualidad, dónde se mueve la gente, de qué habla”, afirma el informe, porque “muchas de las nuevas funciones tienen que ver con satisfacer los deseos, los gustos y las necesidades reales de los consumidores. En este sentido, el conocimiento del individuo se vuelve más relevante, además de lo que se puede desprender del estudio del big data”.
El informe “Deconstrucción/reconstrucción del creativo” enfatiza además que, dada la creciente complejidad, un creativo debe ser capaz de trabajar en equipo y de desarrollar un pensamiento digital nativo. A este respecto, el estudio refleja la creciente brecha existente entre los profesionales más senior, a quienes les cuesta más pensar en digital, y los llamados “nativos digitales”.
Una metodología exigente
A la hora de lanzar este estudio sobre el entorno actual de la creatividad, c de c y Universidad Nebrija se marcaron tres objetivos:
- Identificar el perfil del creativo actual, sus competencias y sus habilidades.
- Descubrir qué herramientas necesitan los creativos, hoy para mejorar y enriquecer su trabajo y poder proyectar su talento.
- Pronosticar escenarios de futuro para este colectivo.
Posteriormente se llevaron a cabo una serie de entrevistas cualitativas tanto a profesionales de la creatividad como a un nutrido grupo de representantes de los anunciantes.